Un conductor se distrae mirando el móvil y casi atropella a un motorista al saltarse un ceda en una rotonda de Oviedo: “Este vídeo debería ser suficiente para que la DGT le cite para el curso de reeducación vial”

Marina Ortega
Cualquier persona que conduzca puede cometer, sin querer, un error al volante. A veces aparcamos sin querer en una zona de carga y descarga, en un vado o se nos olvida de poner un intermitente en un momento dado. Pero hay imprudencias mucho más graves que otras. Algunas de ellas pueden incluso poner en riesgo la vida de uno mismo y la de otras personas.
Y es que, a veces, algunas personas olvidan la importancia de conectar los cinco sentidos con la conducción cuando se está al mando de un vehículo. Hacerlo resulta imprescindible para la seguridad propia, pero también para la del resto de conductores y personas que pueden encontrarse alrededor y que podrían resultar heridos si se ocasionase un accidente por un despiste nuestro.
No son pocas las imprudencias que se cometen al volante en España. Hace unos años, estas solamente quedaban en el recuerdo de quienes las habían vivido. Sin embargo, hoy en día, con la entrada de redes sociales en el juego, algunos perfiles recopilan vídeos de situaciones temerarias en las carreteras. Es el caso de Dashcams España, cuyas publicaciones se cuentan por miles y se actualizan día a día. Por perfiles como estos, podemos hacernos una idea de que el peligro en la carretera es el pan de cada día en nuestro país.
Esta cuenta de Instagram ha compartido recientemente un vídeo en el que se observa a un coche que circula por una rotonda de Oviedo. Las imágenes se capturan desde el manillar de una motocicleta que conduce por la glorieta.
Al inicio del vídeo todo parece correcto. La cámara captura en imágenes cómo el motorista circula por el carril exterior de la rotonda con total normalidad. Sin embargo, todo se tuerce cuando este conductor llega a la altura de una entrada a la glorieta.
Por ella, se acerca un coche negro. Sin embargo, en lugar de ceder el paso, como debería hacer para entrar en la rotonda, el conductor del coche, que va distraído mirando el teléfono móvil, entra sin mirar y casi atropella al motorista, quien se ve obligado a frenar en seco para evitar una peligrosa colisión.
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